Anticonvulsivos

Los anticonvulsivos también pueden ser usados para el tratamiento del dolor neuropático, especialmente del dolor fuerte. Estos medicamentos se conectan con el sistema nervioso central y aumentan el umbral del dolor, reducen la frecuencia de las respuestas neuronales afectando así la activación de las neuronas del centro epiléptico.

El uso de los anticonvulsivos ayuda a los pacientes a sentirse mejor y volver a la vida normal. No experimentará molestias durante cualquier actividad, ya que estará seguro de que no tendrá ningún ataque repentino o una reacción convulsiva.

Los anticonvulsivos pueden usarse en combinación con otros medicamentos para el tratamiento de la psicosis maníaco-depresiva, ya que pueden conectarse con los receptores del cerebro que influyen en el estado emocional de la persona. Estos medicamentos tienen una acción de amplio espectro, por lo que para recuperar su salud se abren nuevas oportunidades en la medicina.